Mis tres poetas "del colegio" son Rubén Darío, Pablo Neruda y León de Greiff. Quiero decir, son los tres que recuerdo haber leído explícitamente como ejercicio escolar. Pero la experiencia de haber leído a Rubén Darío, por alguna razón, resalta más. Creo que porque tuve una adolescencia un poco melancólica y "Lo fatal" es el poema melancólico por excelencia, fuego ideal para las crisis existenciales de entonces. Fueron buenos tiempos, en realidad.
LO FATAL
Dichoso el árbol, que es apenas sensitivo,
y más la piedra dura porque esa ya no siente,
pues no hay dolor más grande que el dolor de ser vivo,
ni mayor pesadumbre que la vida consciente.
Ser y no saber nada, y ser sin rumbo cierto,
y el temor de haber sido y un futuro terror...
Y el espanto seguro de estar mañana muerto,
y sufrir por la vida y por la sombra y por
lo que no conocemos y apenas sospechamos,
y la carne que tienta con sus frescos racimos,
y la tumba que aguarda con sus fúnebres ramos,
¡y no saber adónde vamos,
ni de dónde venimos!...
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