domingo, 27 de febrero de 2022

#58 Aléjame de la barbarie (Carmelo Guillén Acosta)

El primer verso de este poema lo he usado como jaculatoria, "aléjame, Señor, de la barbarie". No la del eco ofensivo de otra gente, sino la mía propia, mis ecos bárbaros. Hay mucha barbarie desplegada por el mundo, pero todos luchamos con nuestras barbaries en distinta medida. Así que vengo a hacer de mendiga y pedir una oración para esta casa: "aléjala de sus barbaries."


ALÉJAME DE LA BARBARIE

Aléjame, Señor, de la barbarie

y del eco ofensivo de esa gente

que arrasa tus sagrarios con el único

afán de erradicarte de la tierra;

también del enemigo aquel que viene 

con la sola intención de fastidiarme.

Sitúame, a ser posible, lejos,

o, al menos, dame gracia suficiente

para estarme con ellas a la mesa

y amarlos, como tú, hasta el extremo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario